[postlink]http://histortube.blogspot.com/2010/12/conquista-de-hispania.html[/postlink]http://www.youtube.com/watch?v=820fdpY-GD8endofvid[starttext]Tanto en los casos de Sertorio, como de Pompeyo y César, las clientelas y relaciones parecían ser de tanta importancia como la grandiosidad del territorio al que pretendían mantener anexionado. Hablamos de un territorio de 597,036 km² (Italia 301,338 km²) con todo su potencial en cualquier ámbito, económico, poblacional, logístico, etc.
En todos los casos, salvando quizás a Sertorio que no llegó a poder demostrar sus intenciones de volver a Roma (pero que de haber podido lo hubiera hecho), sus “maneras” de consolidad la Península se limitaron a recorrerla durante un año o algo más. Posteriormente las delegaciones legadas eran para ellos suficientes. ¡Así les fue!
Quizás el error de Roma fue precisamente el no atribuir directamente la ciudadanía de pleno derecho a todas sus conquistas, con todas sus consecuencias hasta años después. Me explico, considerar romanos a todos los ciudadanos dentro de su territorio, independientemente de su origen. A lo mejor con esta integración plena hecha antes, y no con la forma en que dejaban los territorios externos, los 597,036 km² hoy divididos (España y Portugal), hubiéramos servido más pizzas y menos tapas. A mí me encantan las tapas, pero con tanta conquista no se porqué genéticamente también disfruto una lasaña, un entrecot o un cous-cous...[endtext]
En todos los casos, salvando quizás a Sertorio que no llegó a poder demostrar sus intenciones de volver a Roma (pero que de haber podido lo hubiera hecho), sus “maneras” de consolidad la Península se limitaron a recorrerla durante un año o algo más. Posteriormente las delegaciones legadas eran para ellos suficientes. ¡Así les fue!
Quizás el error de Roma fue precisamente el no atribuir directamente la ciudadanía de pleno derecho a todas sus conquistas, con todas sus consecuencias hasta años después. Me explico, considerar romanos a todos los ciudadanos dentro de su territorio, independientemente de su origen. A lo mejor con esta integración plena hecha antes, y no con la forma en que dejaban los territorios externos, los 597,036 km² hoy divididos (España y Portugal), hubiéramos servido más pizzas y menos tapas. A mí me encantan las tapas, pero con tanta conquista no se porqué genéticamente también disfruto una lasaña, un entrecot o un cous-cous...[endtext]
